LAB valora negativamente el acuerdo del ERTE firmado entre la mayoría social y la empresa ZF Aftermarket y considera que refleja “una confianza ciega” de los sindicatos firmantes hacia la compañía. Advierte, además, de que el expediente no incluye garantías de futuro ni protege adecuadamente a las personas trabajadoras.
El ERTE se presentó por causas productivas y organizativas, pero LAB denuncia que “desde el primer día, la única solución propuesta por la empresa es la de sacar producción a su planta de China, para ser más productiva”, y que “no hay más propuestas, ni aunque por unanimidad la parte social así se lo demandáramos a la empresa”.
El sindicato explica que la empresa “ha denegado todo plan de futuro o de viabilidad, alegando que no pueden prever nada más allá de seis semanas, ni producciones, ni inversiones, ni garantías”, lo que contradice, según LAB, “totalmente el solicitar entonces un ERTE para un año entero”.
LAB critica también que, tras los resultados de las cuentas auditadas de 2023, en las que el grupo de empresas se repartió dividendos, “ni siquiera se han firmado complementos salariales al 100% para las personas afectadas”. Según el sindicato, hay trabajadores y trabajadoras que permanecerán casi todo el año bajo el ERTE, con el perjuicio que ello conlleva para su desempleo, según el calendario de afectación firmado.
El sindicato cuestiona la actitud de algunos sindicatos que “han hecho público su agrado con lo firmado y aseguran además haber conseguido garantías de empleo, cuando es mentira”, e insiste en que “eso es precisamente lo que hace que LAB ni nos hayamos planteado la firma, aun habiendo estado hasta el final en las negociaciones haciendo propuestas”.
En la última reunión, LAB denuncia que las “líneas rojas” acordadas por todos los sindicatos al inicio se fueron traspasando progresivamente, hasta que algunos ya daban por hecho que firmarían lo que la empresa pusiera sobre la mesa.
Finalmente, el sindicato valora negativamente un ERTE que considera “acordado sin miras al futuro de la empresa” y señala con preocupación otros casos, como los de MOVINORD en Berrioplano o BSH en Esquiroz, plantas que también atravesaron ERTEs y cuyo resultado genera inquietud sobre un posible desenlace similar para los trabajadores.

