LAB ha presentado a EH Bildu la Agenda Sociolaboral a tener en cuenta en las negociaciones de cara a la investidura y la próxima legislatura del Gobierno español, con el objetivo de que se garantice el derecho de las y los trabajadores vascos a poder decidir y negociar aquí los salarios y las condiciones de vida, sin ninguna injerencia.
El documento presentado por LAB en la reunión, titulado Aportación de LAB al cambio social y político, puede consultarse a continuación:
Hoy LAB se ha reunido con EH Bildu y la semana que viene hará lo propio con el PNV. Tanto EH Bildu como LAB han acordado trabajar de forma conjunta de cara a blindar la negociación colectiva en nuestro ámbito y dar pasos hacia el sistema de pensiones propio.
El escenario político existente tanto en Hego Euskal Herria como a nivel estatal ha sido objeto de análisis en la reunión mantenida entre LAB y EH Bildu hoy en Bilbo. En representación de LAB han participado el portavoz de Nafarroa Imanol Karrera, el secretario de Acción Social Endika Perez y la Coordinadora General Garbiñe Aranburu; en nombre de EH Bildu han acudido la senadora Idurre Bideguren y el coordinador general Arnaldo Otegi.
En opinión de LAB, el independentismo necesita una estrategia eficaz para configurar un marco propio de relaciones laborales y protección social. Hay que crear un nuevo modelo de relaciones laborales y de protección social, desde Euskal Herria para Euskal Herria, que garantice a las personas trabajadoras unas condiciones laborales y de vida dignas. Para poder desarrollar ese recorrido, es necesario incidir en Madrid en aras a superar las limitaciones impuestas por el Estado. Desde esta perspectiva, LAB ha puesto sobre la mesa dos grandes prioridades.
En primer lugar, desarrollar el Código Laboral Vasco que sustituiría al Estatuto de los Trabajadores español, para poder dar respuesta a la necesidad de acabar con la estatalización de las relaciones laborales y blindar el marco propio de negociación colectiva, garantizando la prioridad de los convenios provinciales y autonómicos sobre los del Estado y dejando sin efecto la modificación legislativa realizada en 2012 por el Gobierno de Zapatero. Todos los agentes de la CAV coincidimos en ello, como demuestra el acuerdo interprofesional firmado entre sindicatos y patronal. La clave es respetar lo que se negocia y se acuerda en Euskal Herria.
Además de incidir en Madrid con el fin de superar los límites impuestos desde el Estado, LAB señala también que lo que no se puede conseguir en el Estado debe hacerse posible en Euskal Herria; ha remarcado en la reunión que sólo hace falta voluntad política para dar una respuesta adecuada a las reivindicaciones de las y los trabajadores. Y ha reclamado esa misma voluntad para cambiar la situación del personal de la Función Pública. LAB ha subrayado la necesidad de eliminar las limitaciones al desarrollo de los servicios públicos que se impusieron tras 2008 y ha considerado necesario que las tasas salariales y/o de reposición de las y los trabajadores públicos no estén reguladas por los Presupuestos del Estado. En otras palabras, el sindicato exige que la CAV debe disponer de la competencia para regular la Función Pública, y así se lo ha trasladado a EH Bildu. En la Función Pública de la CAV se han convocado dos jornadas de huelga para denunciar el declive de los servicios públicos y mejorar las condiciones salariales y laborales de los y las trabajadoras públicas.
Así mismo, en la reunión también han tratado la situación de otros colectivos. En referencia a la situación de las trabajadoras del hogar y las y los trabajadores conocidos como riders que se dedican a tareas de reparto, LAB ha destacado la necesidad de garantizarles el derecho a la negociación colectiva y la importancia de desarrollar convenios a nivel de comunidad autónoma.
En segundo lugar, LAB prioriza también la reivindicacion de la transferencia de la gestión de la seguridad social prevista en el Estatuto de la CAV (y que también reivindica para Nafarroa Garaia) y la posibilidad de crear un sistema público complementario que garantice una pensión mínima de 1.080 euros. Con ello, además de mejorar las condiciones de vida de miles de pensionistas, se puede establecer una base para la creación de la futura Seguridad Social Vasca.
Dichas propuestas han sido bien recibidas por parte de EH Bildu, y ambas partes han mostrado su disposición a colaborar en adelante a favor de las mismas.