Hoy, en los parlamentos de Gasteiz y de Iruñea, se han votado sendas resoluciones sobre el genocidio en marcha en Palestina, las graves vulneraciones de los derechos humanos, y la necesidad de acabar con la impunidad de quienes vulneran esos derechos o son cómplices de dichas vulneraciones.
En la moción del parlamento de la Comunidad Autónoma Vasca se pide explícitamente la suspensión del Acuerdo de Asociación Unión Europea-Israel, una reivindicación hecha pública por el sindicato LAB desde hace meses, y por lo tanto la noticia nos parece muy positiva. En el caso de las mociones aprobadas por el Parlamento de Nafarroa, en una de ellas se pide un alto al fuego, se condena el genocidio, la ocupación y la colonización del territorio palestino y en la segunda, entre otras cosas, “se insta al Gobierno de Navarra y al Gobierno del Estado a impulsar las iniciativas necesarias para garantizar que, por medio del requerimiento de declaraciones responsables, de verificaciones mediante fuentes rigurosas y confiables y/o a través de cualquier otra herramienta que considere oportuna, y tanto en los encargos de obras y servicios, como en las compras pública y en los procedimientos de subvenciones, se excluya a todas aquellas personas jurídicas que participen, directa o indirectamente, en actividades económicas, comerciales, logísticas o tecnológicas que contribuyan al mantenimiento, ejecución o facilitación de actos constitutivos de genocidio, crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad o apartheid, conforme al Derecho Internacional.”
Desde el sindicato LAB valoramos positivamente las mociones aprobadas en los parlamentos autonómicos de Hego Euskal Herria. Desde hace tiempo LAB ha venido reclamando la necesidad de articular una respuesta amplia, contundente y transversal ante el genocidio sionista contra el pueblo palestino y creemos que las mociones aprobadas hoy van en la dirección correcta.
Sin embargo, desde el sindicato LAB creemos que es necesario, como medida necesaria para detener la ocupación, el apartheid y el genocidio en Palestina, dar pasos más valientes y romper relaciones con el sionismo.
Cuando familias enteras son exterminadas, cuando hospitales y universidades son destruidos sistemáticamente, cuando niñas y niños son enterrados bajo los escombros, cuando millones de personas son bombardeadas, son asesinadas de hambre y son forzosamente desplazadas, no se trata de una cuestión semántica, se trata de genocidio. La obsesión con la terminología legal es una cortina de humo, un argumento aparentemente fáctico cuyo propósito es justificar la matanza en lugar de detenerla.
Porque no se trata tan sólo de palabras o mociones. Cuando se utiliza el hambre como arma de guerra, se cometen masacres de civiles, con miles de niños y niñas muertos, lisiados, privados de la atención sanitaria esencial, los hechos y las declaraciones tienen que exigir la tipificación de genocidio por parte del sistema de justicia internacional. Ante un genocidio no se negocia, se detiene el mismo, y posteriormente, se abrirán las puertas a la búsqueda de una salida diplomática integral y sostenida en el tiempo.
El sindicato LAB cree que todos los pasos que se dan en esta dirección pueden terminar definiendo una política internacional que pase de las palabras a los hechos y que se implique en el reconocimiento más que justo y necesario de los derechos humanos de una población palestina, que lleva años soportando la omisión de las instituciones competentes.
Ahora es más necesario que nunca poner fin a la impunidad del gobierno israeli, dando pasos más audaces y rompiendo las relaciones con las estructuras sionistas, empezando, en el caso de los sindicatos, por aislar de todo ámbito sindical internacional al sindicato del régimen sionista Histradut.