El coordinador general Igor Arroyo ha reclamado la necesidad de soberanía para hacer frente al contexto global inestable.
Hoy, en una comparecencia realizada en Bilbo, Igor Arroyo, coordinador general de LAB, y Maider Jauregi, responsable de comunicación, han informado sobre las movilizaciones del Primero de Mayo. LAB llevará a cabo manifestaciones propias en Bilbao, Donostia, Gasteiz, Iruñea y Tutera; al igual que el año pasado, también tendrá un bloque propio en la manifestación intersindical de Baiona.
Arroyo ha hecho referencia al contexto global: “El contexto internacional es cada vez más complicado. La lógica del capital está poniendo en peligro en planeta y la vida de las personas, como indican la crisis ecológica, el militarismo, los enormes procesos migratorios forzados, la violencia machista o la expansión de la precariedad. En este contexto, es aún más importante que Euskal Herria tenga la mayor soberanía posible para construir un modelo socioeconómico que ponga la vida en el centro”.
Ha puesto en valor las luchas sociales y sindicales de los últimos años: “Gracias a ellas, se han situado en la agenda política temas importantes para la clase trabajadora vasca, como el sistema de salud, los cuidados, la vivienda, las pensiones o el salario mínimo”. Sin embargo, ha advertido sobre el riesgo de que estos debates se cierren en falso: “Pradales ha cambiado las formas, pero esencialmente no vemos un cambio significativo: la reforma fiscal realizada por PNV-PSE mantiene los privilegios de la élite económica y, en la mesa de salud, el Gobierno Vasco está mostrando su intención de seguir con la privatización del sistema de salud”.
Por ello, Arroyo ha hablado de la necesidad de hacer presión en los centros de trabajo, en la calle y en las instituciones en favor de la soberanía y la transformación social; ha mencionado tres prioridades: desarrollar los servicios públicos, poner en marcha una nueva política industrial y garantizar ingresos mínimos para toda la ciudadanía.
En cuanto a los servicios públicos, el coordinador de LAB ha subrayado la necesidad de dejar de lado las políticas privatizadoras de las últimas décadas: «Los sindicatos llevamos años denunciando la privatización del sistema de salud, el desmantelamiento de la escuela pública, la vulneración del derecho al cuidado y la especulación sobre la vivienda. Es necesario un cambio profundo en las políticas públicas para garantizar salud, educación, atención y vivienda a toda la ciudadanía. En Euskal Herria existe la capacidad para ello: los empresarios y las rentas altas deben pagar los impuestos que les corresponden para financiar los servicios públicos que este pueblo necesita».
En lo que respecta a la política industrial, LAB aboga por una transición basada en tres criterios: planificación, intervención pública (incluso en la propiedad de las empresas) y participación de las y los trabajadores. En esta línea, ha criticado el discurso empresarial e institucional a favor de la industria armamentística: “La recuperación industrial de Euskal Herria no puede basarse en la industria armamentística, ya que el militarismo trae consigo la destrucción de la vida, acelera la emergencia ecológica y genera recortes sociales. Por el contrario, Euskal Herria debe asumir el liderazgo en la transición ecosocial, de ahí vendrá el futuro de la industria vasca”.
En tercer lugar, ha hecho referencia al salario mínimo y las pensiones: “Garantizar un ingreso básico digno para toda la ciudadanía y reducir las brechas basadas en diferentes variables son dos medidas estructurales. Es imprescindible establecer un salario mínimo propio y una pensión propia en Euskal Herria, ya que para vivir aquí se necesitan ingresos más altos. Además, desde la perspectiva del autogobierno, son objetivos de gran importancia, porque un autogobierno que no sea capaz de garantizar unas condiciones básicas de vida a la ciudadanía, es un autogobierno limitado”.
Como es sabido, ya están en marcha iniciativas para establecer unas pensiones y unos salarios mínimos propios. El movimiento de pensionistas ha llevado a cabo una exitosa Iniciativa Legislativa Popular (ILP), y la mayoría sindical está a punto de lanzar una iniciativa popular para traer la competencia del salario mínimo a Hego Euskal Herria.
En cuanto al acuerdo interprofesional que fijaría el salario mínimo, las patronales Confebask y CEN han rechazado negociar dicho acuerdo. Arroyo ha calificado de inaceptable la actitud de ambas patronales: “Por un lado, reciben apoyo institucional, dinero público, beneficios fiscales, y adquieren representación institucional. Pero por otro lado, evitan cumplir con su obligación de negociar de buena fe, tanto en lo que respecta al salario mínimo como a los convenios de las trabajadoras del hogar, e incluso a decenas de convenios que están bloqueados. Aprovechar los recursos de la sociedad y las instituciones públicas, pero eludir su responsabilidad, es actuar como un parásito”.
Ante el rechazo de Confebask, Arroyo ha solicitado la intervención del Gobierno Vasco: “Confebask recibe numerosos beneficios de las instituciones públicas. Por lo tanto, le pedimos al Gobierno Vasco, al PNV y al PSE que condicionen el apoyo que le otorgan a Confebask. Que les digan, de manera clara y rotunda, que si no se sientan en la mesa de negociación, se les retirará el apoyo político, institucional y material”.
Como en las movilizaciones de las últimas semanas, el Primero de Mayo LAB enviará un mensaje claro tanto a la Patronal como a las instituciones: “Ya sea mediante un acuerdo interprofesional o mediante ley, no descansaremos hasta establecer un salario mínimo propio y digno. Más pronto que tarde, superaremos el veto impuesto por Confebask para crear la mesa de negociación”..
Movilizaciones
Bilbo, a las 12:30 desde Zabalburu.
Donostia, a las 12:00 desde la Plaza Easo.
Gasteiz, a las 12:00 desde la Plaza Bilbo.
Iruñea, a las 12:00 desde la Plaza del Castillo.
Tutera, a las 12:30 desde la Plaza de los Fueros.
Baiona, a las 11:00 desde la estación de tren.
Maule, a las 11:00 en Kurutze Xuria.







