La tasa de paro baja al 7,1% en Hego Euskal Herria. El número de personas en paro ha descendido en 6.300 y el de las personas ocupadas en 29.900. Pero llama la atención que la tasa de actividad esté muy baja (56,25%), a pesar del aumento del número de trabajadores y trabajadoras activas (23600), que se debe en mayor medida al aumento de la población.
En el último trimestre, sin embargo, a pesar de mantenerse la tendencia descendente del paro, que ha descendido un 3,57%, el número de trabajadoras y trabajadores activos ha descendido (hay 3700 personas menos en paro – 2200 personas más trabajando y 1600 menos en activo). Para entender mejor lo que ocurre, debemos fijarnos en la brecha de género. Entre las mujeres sube el paro (13600 personas paradas más) y hay 1100 mujeres menos trabajando, mientras que entre los hombres hay menos parados y más trabajadores. De hecho, en verano los datos ponen de manifiesto tanto la precariedad como la inestabilidad en los sectores feminizados, debido a las precarias condiciones laborales de las mujeres, a las que se les suspende el contrato de trabajo.
En el último año, la tasa de paro entre las mujeres ha aumentado al 8,6% (6200 mujeres más ocupadas – 12300 paradas más), mientras que entre los hombres ha descendido al 5,6% (23900 hombres menos ocupadas – 18700 parados menos). En cuanto a la tasa de actividad, los hombres tienen una tasa de actividad superior a la de las mujeres (59,73% frente al 52,97%), situándose casi la mitad de las mujeres fuera del mercado laboral.
La precariedad e inestabilidad que se manifiesta durante el periodo estival también tiene un impacto directo entre los jóvenes y las y los trabajadores migrados. De hecho, la tasa de paro juvenil se reduce al 20,9% y la de los trabajadores migrados al 18,8%, debido a las contrataciones temporales de verano. La tasa de trabajadores que buscan empleo a largo plazo se ha reducido al 34,3% debido a los contratos de verano.
La proporción de contratos indefinidos e eventuales (82,4% y 17,6% respectivamente) ha variado ligeramente, con un ligero aumento de los indefinidos. Entre las mujeres, en cambio, ambos han descendido, manteniendose la brecha entre hombres y mujeres debido al aumento del contrato eventual entre las mujeres (20,2% entre las mujeres, 15,1% entre los hombres). Y es que, a pesar del aumento de la plantilla, entre las mujeres se han firmado menos contratos (14100 menos) que entre los hombres (19800 más).
En cuanto a la jornada laboral, la proporción de personas que trabajan a jornada parcial en el último año ha aumentado al 14,8% (a pesar de haber descendido en el último trimestre). En este ámbito, también existe una brecha de genero importante, puesto que mientras que entre mujeres la jornada parcial es del 22,7%, entre los hombres baja al 7,5%.
Frente a las politicas que impulsan la precariedad y la inestabilidad estructural en el mundo laboral, el incremento del Salario Mínimo Interprofesional se ha convertido imprescindible para el conjunto de la clase trabajadora y con un impacto positivo en las condiciones de trabajo de todas y todos los trabajadores. De hecho, las brechas están aumentando y el empleo unicamente no puede garantizar ingresos suficientes para garantizar una vida digna. El sindicato LAB, junto con otros agentes sociales y sindicatos, estamos llevando a cabo una larga fase de lucha para posibilitar un incremento del SMI acorde a la realidad de nuestro país. A la vista de la realidad que nos muestran los datos de paro de hoy, una vez más, debemos aprovechar para denunciar con contundencia la actitud de la patronal Confebask y de las instituciones, ya que no es lícita la negativa de la patronal a negociar la subida de la LGS o el Informe desfavorable presentado por el Gobierno Vasco contra HEL-a. El sindicato LAB hará frente a situaciones de precariedad e inestabilidad y reforzará las movilizaciones para mover posiciones y recabar el mayor apoyo posible.

