Hoy, Día Internacional de las Personas Migrantes, y todos los días, en LAB queremos reconocer a estas y estos compañeros por estar sosteniendo en muy malas condiciones laborales sectores fundamentales de la economía vasca, y sobre todo, poner en valor su aportación social, cultural y política en los pueblos y barrios de Euskal Herria.
El racismo está en el ADN del sistema en que vivimos (y del que somos parte), se permea por todos lados, de manera cada vez más impune.
La libre circulación de las personas debería ser un derecho, sin discriminaciones ni abusos. Sin embargo, las políticas de frontera, la Ley de Extranjería y la gestión de las comunidades autónomas, diputaciones y ayuntamientos de algunas competencias vinculadas a acogida, migración, formación y empleo se retroalimentan configurando un entramado racista que clasifica y construyen personas de primera, de segunda, tercera, e incluso “no personas”, a las que se explota, persigue, criminaliza y estigmatiza según conveniencia económica. Las personas migradas y/o racializadas no son una amenaza en Euskal Herria y son mucho más que mano de obra barata y servicial. Rechazamos esta mirada alarmista, reduccionista e instrumental.
Desde nuestro lugar, como organización sociosindical, nuestra compromiso es luchar en contra de los abusos en el ámbito del empleo y garantizar derechos y condiciones justas para todas las personas trabajadoras. Por ello, apostamos por una acción sindical antirracista que detecte, desmonte y acabe con el racismo laboral.
Esta tarea nos involucra a todas y todos. Es mucho lo que en LAB hemos y estamos aprendiendo de y con las personas migradas y/o racializadas organizadas y en lucha en diversos sectores laborales.
ELA, LAB, Steilas, Hiru y Etxalde hemos anunciado la convocatoria a una huelga general el próximo 17 de marzo para exigir un salario mínimo de 1.500 euros en Hego Euskal Herria. Lucharemos para mejorar los salarios mínimos, porque la mayoría trabajadora y precarizada no llega a cubrir las necesidades mínimas para la vida. Lucharemos para reducir y acabar con las brechas salariales, pero sobre todo contra el sistema capitalista, patriarcal y racista, que es el que excluye, invisibiliza y infravalora esos sectores que carecen de reconocimiento social y económico.
Esta será una huelga que va más allá, porque apunta a las raíces estructurales de este sistema injusto y desigual. Vamos a combatir la acumulación del capital y la patronal para repartir la riqueza, especialmente entre las que peor están, porque este sistema se ha engordado sobre la base del expolio de sus cuerpos-pueblos-territorios. Como sindicato tenemos una deuda con estas compañeras. Esta huelga general es una oportunidad de repararla en clave de justicia social.
Vamos a esta huelga con fuerza e ilusión. Será una huelga especial. Esperamos que las trabajadoras migradas y/o racializadas, sus voces y experiencias encuentren el lugar que merecen, un lugar protagónico. LAB quiere ser una herramienta útil y cercana para todas, trabajaremos para que os sintáis escuchadas e invitadas a aportar en este proceso colectivo.
Cada sector, cada compañera y compañero, desde realidades y condiciones diversas, puede sumar y hacer de esta huelga un camino común, que será más rico, potente y coherente con la presencia de las trabajadoras migradas.
Asimismo, queremos reivindicar en el día de hoy que nadie es ilegal y reivindicar la regularización, así como reafirmar el compromiso de luchar contra todo racismo laboral. Queremos todos los derechos para todas las personas. Por ello, nos sumamos a las convocatorias realizadas por el movimiento antirracista y migrante en los barrios, pueblos y ciudades de Euskal Herria, y hacemos un llamamiento a participar en ellas.

