La bajada del paro se ha dejado notar más en los hombres (-1,7%) que en las mujeres (-1,1%), de manera que el colectivo de personas desempleadas es mayoritariamente femenino (57,7% del total).
Por el contrario, el aumento del desempleo ha vuelto a golpear a la juventud, que ya parte de una situación de desventaja al tener que enfrentar mayores dificultades para acceder a un empleo y estar sujeta a mayores cotas de precariedad.
En marzo aumentó en 80 el número de jóvenes menores de 25 años que se encuentran en desempleo y son 619 más que en marzo del año pasado, lo que supone un incremento interanual del 5,7%.
Por otro lado, la lacra de la temporalidad tampoco afloja, y sólo ocho de cada cien contratos firmados en los cuatro territorios fueron indefinidos.
En lo que respecta a los graves déficits del sistema de proteccion por desempleo y su reducido nivel de cobertura, señalar que el SEPE ya ha comenzado a conceder en marzo el subsidio por desempleo a mayores de 52 años, pero la información que hoy ha publicado sobre prestaciones se refiere al mes de febrero.
Según estos datos, en febrero un total de 65.483 personas recibieron algún tipo de prestación por desempleo en Hego Euskal Herria, pero en más del 38% de los casos se trata de una mísera prestación asistencial que de media no supera los 430 euros.
Además, del total de personas beneficiarias del sistema de prestaciones únicamente 49.682 están oficialmente en paro, mientras que el resto están excluidas de dicha consideración por diferentes motivos administrativos.
Todo esto significa que en Hego Euskal Herria más de 104.000 personas paradas no recibieron prestación alguna por desempleo. Por tanto, la tasa de cobertura del sistema tan sólo alcanza al 32,3% de las personas desempleadas, y es más reducida entre las mujeres (29,7%) que entre los hombres (35,8%).