En Hego Euskal Herria se han registrado 137.559 personas paradas en agosto, lo que supone un aumento del 3,02% respecto a julio. Respecto a agosto del año pasado, sin embargo, el paro ha descendido. Entre los territorios, sin embargo, hay diferencias: mientras que en Gipuzkoa (5,85%), Bizkaia (3,43%) y Araba (2,91%) ha aumentado el paro, en Navarra ha bajado un 0,53%.
Respecto al último año, el paro ha bajado en todos los sectores, excepto en el sector de la industria, en el cual hay 133 personas en paro más. Analizando los datos del mes anterior, podemos afirmar que están saliendo a relucir los signos de la preocupante situación que vive el sector industrial. De hecho, a pesar del aumento del paro en todos los sectores, el número de parados en el sector industrial ha experimentado un notable aumento, con 458 parados más en el último mes. En términos cuantitativos, sin embargo, el mayor incremento se ha producido en el sector servicios, con 3.965 personas inscritas al paro, una vez finalizados los contratos de verano.
En el último año, 450 trabajadores sin empleo anterior han encontrado empleo, la mayoría menores de 25 años y mujeres. En este caso, el 78% de las mujeres mayores de 25 años que ha encontrado empleo estaba en situación de sin tener empleo anterior. Sin embargo, la mayoría de las personas desempleadas (59,27%) siguen siendo mujeres.
Entre las personas migradas, el paro ha descendido tanto en el último año como en el último mes, a pesar de que entre las personas migradas en paro el 31,27% no ha tenido empleo anterior.
Entre los contratos firmados en agosto, la mayoría (79,62%) han sido temporales y en el sector servivios (76,65%).
La afiliación también ha descendido respecto al mes anterior, pero ha subido respecto al año anterior. En Hego Euskal Herria en agosto se contabilizaron 1.063.516 personas afiliadas. La mayor parte de la afiliación pertenece al sector servicios, el 73,69%, y el 84,83% de la afiliación generada en el último año corresponde también a dicho sector. Por lo tanto, en Hego Euskal Herria se está consolidando un sector en el que predominan las condiciones laborales, tanto precarias como inestables.
Si analizamos el tipo de contrato, deducimos que la brecha de género también es estructural en lo referido a las condiciones laborales. De hecho, mientras que una de cada cuatro mujeres (25,5%) tiene contrato a jornada parcial, entre los hombres la proporción es uno de cada 10 (11,4%). En cambio, en el caso de los contratos de trabajo a jornada completa, la tendencia es la contraria: entre las mujeres el 58,7 tiene jornada completa frente al 79,1% de los hombres.
El empleo que se genera se caracteriza por la precariedad y la inestabilidad, tendencia que se acentúa en el periodo estival. Una clara muestra de la inestabilidad es el empleo que se crea para un tiempo limitado y se destruye sin ningún reparo. Este empleo temporal es a la vez precario y tiene un impacto directo tanto en jóvenes como en mujeres.
Asimismo, el predominio del sector servicios incide directamente tanto en la relación laboral como en la calidad del empleo, ya que, sin poder corregir las condiciones de trabajo, la precariedad se ha convertido en estructural en este sector. Por lo tanto, a las puertas de este nuevo curso, queremos subrayar la importancia de la lucha sindical por unas condiciones laborales dignas y por un nuevo modelo socioeconómico.

