Un convenio que avala la destrucción de empleo, no contempla mejoras sociales para la plantilla, aumentará la precariedad en el colectivo de eventuales, y además, supone un mayor enriquecimiento a una empresa privada con dinero público, debido a la inexistencia de mejoras sociales y la escasa subida salarial.
En la siguiente tabla podemos ver quién sale ganando por goleada tras la última inyección de dinero público por parte de la Diputación Foral de Bizkaia a la empresa EMB, en comparación con el acuerdo alcanzado por UGT y CCOO.
Con este acuerdo la empresa se asegura ingresar más de 7,5 millones de euros para el ejercicio del año 2018 y más de 3 millones de euros en 2019 y 2020. Ingresos que deben sumarse a los más de 4 millones de euros de beneficio que ya obtenía en el último ejercicio.
La Diputación ha aprobado estas subidas para EMB y el resto de concesionarias de Bizkaibus y esto no es sino la continuidad de aquella partida presupuestaría de 12 millones de euros que ya se denunció en el 2014. Las subidas son las siguientes:
Con estos números sobre la mesa, queda bien claro que la Diputación está premiando la destrucción de empleo y la precarización de las condiciones laborales, no asegurando así un servicio público y de calidad. Premiando con dinero público a las empresas para que se repartan los beneficios que esas subidas les va a suponer y a lo que adicionalemente sumarán por el ahorro en los puestos que van a amortizar o subcontratar.
Resulta vergonzante que tales cantidades de dinero público no repercutan en beneficio de la sociedad bizkaina, trabajadoras incluidas, sino que vayan a las arcas de empresas privadas que solo buscan hacer negocio y aumentar más sus beneficios con el transporte público de viajeros.
Por todo ello LAB hace un llamamiento a las plantillas de PESA LUR y GAM Txorierri, las dos empresas de Bizkaibus con convocatorias de huelga en estos momentos sobre la mesa, a que no alcancen cualquier acuerdo en sus empresas y que aseguren la no amortización de puestos, para un mejor servicio para la ciudadania, además de unas mejores condiciones laborales tanto económicas como sociales para la plantilla.
Por otro lado, LAB advierte que el problema puede reproducirse en Bilbobus, y por eso quiere dejar claro al Ayuntamiento de Bilbao que debe asumir su responsabilidad asegurando un servicio de calidad sin amortización de puestos de trabajo, sin precariedad en la plantilla eventual, con seguridad para las trabajadoras, etc. Asegurándose y asegurando a la sociedad bilbaína que el dinero público destinado a Bilbobus es para un servicio de calidad social y laboral y no para que empresas como la multinacional ALSA siga haciendo el agosto en Bilbao y Bizkaia.
Por ello LAB va a mantener una postura muy clara en cada una de las empresas de Bizkaibus y en Bilbobus, intentando lograr acuerdos beneficiosos para las plantillas y la ciudadanía, no cerrando acuerdos como el que está planteando CCOO y UGT que lo único que hace es destruir empleo, precarizar condiciones laborales, empeorar el servicio público de transporte y engordar los beneficios de las empresas privadas. Algo que quizá obedezca a favores politicos por el color político de quienes ocupan la cartera de transporte tanto en la Diputación Foral de Bizkaia como en el Ayuntamiento.